Las mamas tenemos que aprender aun mas de lo que sabemos y hacemos por nuestros hijos. A mio me toco pasar momentos
estresantes y no saber como actuar y tener que recurrir a libros de primeros auxilios, mientras llegaba el medico.Mi hijo Marcos
comenzo a tener
vómito, dolor en el estomago, daba la
impresión de que se asfixiaba y hablaba incoherencias. Se imaginan mi
gran desesperacion.Grite pidiendo ayuda , una vecina le tomaba el pulso, mientras yo trataba de llamar un medico y ambulancia.Su pulso estaba muy alterado. Me asuste
muchisimo, trataba de saber que le pasaba. De pronto veo una caja de medicamentos
vacía, me
enloquecí, en esa caja
había dos
o tres pastillas, pero para un niño de tres años, era tremendo. Desesperada
empecé a buscar mientras llegaba la ambulancia , un libro que tengo, con conocimientos de primeros auxilios. Aclaro que estaba sola con una vecina, que trataba de calmarme.
Recordé que ese libro estaba en un
cajón de la cocina.
Leí el articulo de intoxicaciones y los
síntomas eran muy semejantes a los de mi Marcos.Menos mal que no le di leche, ya que esto es nocivo, no
podía preguntarle nada ,porque
decía incoherencias,
leí luego que
debía mantener la calma y
allí trate de tranquilizarme un poco. Trataba de seguir los consejos y estaba leyendo sobre los
vomitos , en ese preciso momento mi hijo comenzo a vomitar.Como
decía en las indicaciones, tome un pocillo y logre juntar algo del vomito, para que lo
analicen en el hospital.
Decía el articulo sobre administrar
neutralizantes del toxico,no sabia que darle,entonces
decidí que el medico lo
debía hacer,porque yo no estaba capacitada para hacerlo,no sabia que darle, luego llego el medico que lo atendio con
rapidez, lleve el vomito y las pastillas de medicamentos que encontre a mano,cerca de donde el estaba. Efectivamente
había ingerido pastillas de medicamento, porque
creyó que eran caramelos.Fue un descuido terrible e imperdonable. Ahora tomo recaudos con todo, no solo con los medicamentos,
también con los restos de bebidas
alcohólicas que quedan en los vasos, con los aerosoles y perfumes, con los productos de limpieza con las plantas decorativas que pueden tener partes venenosas.
Además me asesore de muchas cosas, entre ellas que a un niño cuando este enfermito ya sea con
resfríos o enfermedades de la infancia, que nunca se le deben dar los medicamentos recetados a oscuras o con poca luz. Es imprescindible estar muy seguro de lo que se les da.
También aprendí que los niños ni siquiera deben inhalar productos nocivos.Pase unos momentos horribles que me hicieron sentir muy culpable, pero gracias a Dios, mi
Marquitos no tiene secuelas de
ningún tipo. A mi me quedo un sentido de responsabilidad y una gran necesidad de estar informada y atenta a mi hijo, a sus juegos,a sus
compañias y a todos sus actos. Cuidarlo, porque es muy pequeño e ignora los peligros.
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